Ayudados por la micropigmentación y la extensa gama de colores que ofrecen los pigmentos disponibles en el mercado, y regulados todos por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, podemos camuflar cicatrices tanto en la mama como en el resto del cuerpo para que si bien no las podamos hacer desaparecer si pasen lo más desapercibidas posible.